Desde hace más de ocho meses,
los trabajadores de Colven,
en el municipio Mariño del
estado Aragua, perteneciente
al sector de la industria metálica,
están llevando una lucha
no solo contra los dueños de la
empresa para poder cambiar
sus condiciones de trabajo
y bajos salarios, sino que
también se terminan enfrentando
a los funcionarios del
Ministerio del Trabajo. Desde
la Inspectoría del Trabajo
se retrasan las decisiones,
incluso extravían documentos
y expedientes, buscando que
los trabajadores se frustren en
el largo proceso de legalizar su
sindicato y llevar a cabo su lucha,
mientras el patrón sigue
explotando y oprimiendo a los
obreros de la fábrica.

La empresa con más de 20
años de antigüedad nunca
había permitido que los
trabajadores organizaran
un sindicato, haciendo lo
que les daba la gana con la
vida de los trabajadores. Pero
eso se acabó, ya que desde el
año pasado un grupo de los
trabajadores de la fábrica,
indignados y molestos porque
el patrón y sus socios se llevan
toda la riqueza que los trabajadores
producían y a ellos le
daban salarios miserables y
sin derechos laborales, dio al
paso al frente de organizarse.
En la empresa se gana apenas
salario mínimo, es decir, solo
aumenta el salario cuando
hay decretos gubernamentales
de aumentos del mínimo, sino
ni siquiera esto obtendrían los
trabajadores. Pero los decidieron
organizarse, recogieron
las fi rmas en asamblea para
poder introducir en el Ministerio
del Trabajo su proyecto
sindical, y desde entonces la
“paz” entre los trabajadores
y los patrones dentro de la
empresa se acabó.

Desde la LTS venimos apoyando
esta lucha y entrevistamos
al secretario general del sindicato,
Carlos Zerpa, para dar
a conocer la pelea que vienen
librando, y que es parte de
otras luchas importantes que
se llevan a cabo en Aragua.

ECO: Carlos, cuéntanos,
¿cuáles son las condiciones de
trabajo dentro de la empresa?

CARLOS: En realidad dentro
de la empresa las condiciones
de trabajo son bastantes atrasadas,
hay algunos puestos de
baños que son bastantes inseguros,
en la empresa no hay
áreas marcadas con pintura
para caminar con seguridad,
no existe la ventilación necesaria
para el trabajo que hacemos
y el calor es insoportable
en nuestros puestos de trabajo.
Ahora bien, eso es para nosotros
los obreros, pero para el
personal de confi anza del patrón
es todo lo contrario. Nosotros
tenemos un comité de seguridad
pero es elegido por la
empresa y cuando medio trata
de apoyarnos lo callan rapidito.

ECO: ¿Cómo nace la lucha
que ustedes están llevando a
cabo desde hace ocho meses?

CARLOS: De tanta burla que
hizo la empresa con nosotros,
ya que nosotros antes tocábamos
puertas con la esperanza
de mejorar nuestra situación
económica pero siempre nos
mareaban con la respuesta de
que no hay dinero. Es por eso,
que el 10 de octubre del año
pasado presentamos ante la
Inspectoría de Trabajo de Maracay
el proyecto de nuestro
sindicato, y 10 días después el
supervisor de planta llego a mi
puesto de trabajo para no permitirme
entrar a la empresa,
violando mi condición de secretario
general del sindicato y
la inamovilidad laboral que nos
da el artículo 333 de la LOTTT,
me corta el salario, y desde
ese momento estoy sin ningún
tipo de ingreso fi jo. Luego
la empresa con su chequera
más sus abogados, han tratado
de cerrar nuestro camino
comprando a funcionarios en
la Inspectoría. Y bueno de verdad
que no es fácil, desde ese
momento estoy aguantando
con mi familia esta arremetida
del patrón al despedirme, pero
sigo aguantando sabiendo que
mi familia sufre por no contar
con ingresos para cubrir las necesidades
básicas de mi hogar,
muchas veces trago fuerte para
no rendirme en los momentos
duros que he pasado durante
estos largos meses sin ingresos.

ECO: Los trabajadores de la
fábrica ¿cómo han apoyado la
lucha?

CARLOS: De verdad que si nos
es por ellos esta lucha no estuviese
así, de verdad que el apoyo
de todos es plena porque ya
están cansados de la injusticia.
Los del sindicato contamos
con su respaldo, por ejemplo
cuando la Inspectoría nos echó
para atrás el primer proyecto
sindical, logramos recoger las
fi rmas de nuevo para meterlo
en la Inspectoría una vez más.
Los viernes, cuando es la paga
semanal, me apoyaban dándome
algo de dinero para poder
tener algo por lo menos para
darle algo a mi familia. Todo
este apoyo se logró porque
le he demostrado que soy un
obrero honesto que se prepara
al estudiar las leyes sin ser un
profesional para poder defender
mi clase. Con estas modestas
palabras, les doy las gracias
de corazón a mis compañeros
de trabajo porque de verdad
me han apoyado mucho, y esta
lucha por el sindicato, por el
convenio colectivo y contra mi
despido no estuviese donde estamos
sino fuera por ellos.

ECO: ¿Cuál ha sido el papel de
la Inspectoría del Trabajo?

CARLOS: Mira allí dicen que son
revolucionarios, pero es increíble
cómo la gran mayoría de la
veces toman decisiones a favor
del patrón, algo contradictorio
pero es así, hasta no hace mucho,
la Inspectora que es prima
del ex gobernador Rafael Isea
hizo que nuestra lucha fuese
más dura de lo que el capitalismo
nos hace, o sea, para ellos,
los patrones y sus chequeras
eran más importante que nuestros
derechos. Allí me di cuenta
que la Ley está hecha para que
los patrones ganen la lucha
contra el trabajador al jugar con
nuestro estómago y el de nuestras
familias. Por ejemplo, cómo
es posible que desde el 25 de
octubre esté esperando que me
reenganche la empresa en un
despido que a simple vista fue
para que los obreros de la fábrica
agarren miedo y no luchen.
Es por eso que si los trabajadores
unidos luchan y no recaen
pueden ganar la lucha, y miren
que yo sé que es fácil recaer. El
miércoles 26 de junio, la empresa
a través de la gerente general
tuvo que reconocer a nuestro
sindicato y a mí como secretario
general del mismo al sentarse a
discutir nuestro contrato colectivo
en las instalaciones de la
Inspectoría, porque la inspectoría
los obligó ya que no puede
continuar aceptando el soborno
de la empresa y actuando en la
ilegalidad, y porque nosotros
hemos utilizado nuestras herramientas
de lucha como volantes
informativos, asambleas
de trabajadores y estudios de la
LOTTT. Nosotros los trabajadores
no debemos confi ar en esa
institución del Estado corrupta
y nuestra lucha es de clase,
Entrevistamos a Carlos Zerpa, secretario general del Sindicato
Bolivariano de Trabajadores de la Empresa Vitrinas Colven, en
lucha por su reincorporación y por el contrato colectivo
Trabajadores de COLVEN en Aragua
en pie de lucha
obreros contra ricos.

ECO: ¿Cuál es el llamado que
le haces a todos los trabajadores
de Aragua y del país?

CARLOS: Yo creo que los que
creemos en una revolución de
clases, donde los obreros tomemos
el control de los medios de
producción, donde el explotado
de siempre sea libre de opinar
y todos sus derechos sean
respetados, ese día nosotros
los revolucionarios de corazón
podemos descansar, hoy es mi
lucha y la de los trabajadores
de COLVEN pero hay muchas
luchas en el país y debemos
todos despertar para que las
cosas puedan cambiar. Es importante
entender, que debemos
vencer el miedo y luchar
porque es el momento, no dejemos
que otro lo haga por nosotros.
De verdad que si se meten
en esta lucha, no lo hagan
por dinero sino porque creen
en el compañero que está en la
máquina de al lado. Nosotros
los trabajadores estamos muy
divididos y necesitamos creer
en nuestra propia fuerza y no
en la de otras clases. Es importante
decirle la verdad siempre
a nuestros compañeros de
clase sea mala o buena, no se
vendan a los patrones, es importante
que busquen buenos
aliados, y por último es necesario
que la unidad sea un principio
en la lucha contra el patrón
porque ellos se unen y se preparan
muy bien para jodernos.
¡Que viva la clase obrera!