Mayor endeudamiento con la banca

Según el Ministerio de Planificación y Finanzas para septiembre (2011) la deuda externa llegaba a 39.909 millones US $ y la interna 34.689 millones US $, sumando 74.598 millones de US $ (más de 320.000 millones de bolívares). Así la deuda externa acumulaba entonces un crecimiento de 91% con relación al año 2000 (cuando era de 20.851 millones US$) y la interna aumentó 2.059% (en el 2000 era de 7.242 millones de Bs.) ¡Una fiesta la de los banqueros venezolanos! Esto se traduce penurias a futuro para el pueblo trabajador, con el Estado reduciendo gastos, aumentando impuestos y negando aumentos de salarios, para pagar la deuda a los banqueros.

Desembolsos a la banca imperialista y nacional

El gobierno cumple religiosamente con estos desembolsos, recursos que no van a cubrir salarios ni necesidades populares sino que van a los bolsillos de la banca imperialista y la nacional. Aprobó un Presupuesto Nacional para este año donde el 12% será para pagar deuda, es decir, 36,2 millardos de bolívares para un puñado de banqueros (sacando lo poco que vaya a la banca nacional estatal), más de lo que, por ejemplo, tendrán los ministerios Salud, Trabajo y Seguridad Social, Comunas y Protección Social, e Industrias Básicas y Minería, que juntos suman 29,7 millardos

91% de crecimiento de la rentabilidad de la banca

En esta extraña “revolución anticapitalista” el sector más parásito del capitalismo –los bancos– viven de lo lindo amasando grandes ganancias hace años: así en 2011 aumentó en 91% su rentabilidad con relación al 2010, alcanzando la suma de 14.410 millones de bolívares.

Política de impuestos regresiva: el IVA aporta el doble que el ISLR

Continuando con la tendencia de los años precedentes, Chávez y la Asamblea Nacional aprobaron un Presupuesto 2012 donde el pago por IVA aportará más de la mitad (54%) de los ingresos tributarios, mientras el ISLR a las empresas y personas de altos ingresos aportará solo un poco más de la cuarta parte (27%) de los tributos.

Coerción y criminalización de los trabajadores que luchan

Siguió en 2011 la descalificación pública, juicios penales, medidas cautelares que prohíben a los dirigentes obreros acercarse a los centros de trabajo, amenazas de despido a trabajadores si participan en asambleas, prohibición de realización de asambleas en jornada laboral y despidos injustificados. Algunos pocos ejemplos: el 28 de febrero era condenado a 7 ½ años de cárcel Rubén González, secretario general del sindicato de Ferrominera del Orinoco, por participar de una huelga en 2009, solo la pronta reacción de indignación de diversos corrientes sindicales, la incipiente movilización de repudio en Guayana y la perspectiva de mayores paralizaciones hizo retroceder al gobierno que lo liberó bajo régimen de presentación. En Carbonorca (CVG) fueron despedidos 49 trabajadores por hacer huelga. Se militarizaron algunas empresas básicas para “formar milicianos” que “garanticen el proceso de producción” en caso de paros. Se inició juicio penal de la directiva sindical de la empresa mixta VENRUS por encabezar un paro obrero; 134 manifestaciones pacíficas reprimidas, en su mayoría por cuerpos represivos centralizados (solo entre la GNB y la PNB suman el 60%), aunque también, por supuesto, algunas policías locales donde gobierna la MUD. Así el año pasado se mantuvo y aumentó la cantidad de trabajadores/as judicializados/as por luchar.

Violación de contratos colectivos y del derecho a discutirlos

Continuó el incumplimiento de contratos colectivos en numerosas empresas y establecimientos estatales, así como la negativa a discutir contratos vencidos. Lo que se alternó con la política encabezada directamente por Chávez de imponer unilateralmente aumentos según su voluntad (como en la administración pública), negando la discusión con los representantes de los trabajadores, acompañada en muchos casos de descalificaciones a las luchas y los dirigentes (como con el paro de médicos y enfermeras de la salud pública).

Criminalización de las luchas campesinas e impunidad en los asesinatos

Para junio del año pasado el movimiento campesino Jiraja denuncia un acumulado de 2.500 campesinos imputados penalmente acusados de invasores de tierras. 2011 aportó su cuota de campesinos/ as asesinados/as por luchar por la tierra (que suman ya 258) , mientras el gobierno garantiza una criminal impunidad en la casi totalidad de los casos.

Asesinatos del pueblo pobre a manos de los cuerpos represivos

173 personas fueron ajusticiadas entre octubre de 2010 y septiembre de 2011 por los cuerpos represivos o miembros de esos cuerpos, mediante ejecuciones directas, torturas o “uso excesivo” e “indiscriminado” de la fuerza. El CICPC encabeza –por noveno año consecutivo– la detestable lista, seguido de las FANB y la PNB. (Informe Anual PROVEA).

Un país con detestables desigualdades sociales

A mitad de 2011, después de más de una década de supuesta “revolución”, el 20% más rico del país se quedaba con el 45% del ingreso nacional, mientras al 20% más pobre le tocaba un mísero 6%. Por eso el año pasado 33% de los venezolanos y venezolanas (9 millones 300 mil personas) pertenecían hogares en situación de pobreza, de acuerdo a su nivel de ingresos; de esos hogares casi medio millón (492.115) están en pobreza crítica. A su vez, si se toma el criterio de no tener satisfechas las necesidades básicas, casi un millón y medio de familias (21% de los hogares) está en pobreza, de las cuales casi medio millón (470.114) está en pobreza crítica. (Datos del Instituto Nacional de Estadísticas).