Inicio      |         En Clave Obrera      |         Temas      |         Publicaciones      |         Internacional      |         Videos      |         Contacto
 
 
Otros Artículos / Universidad

Martes 26 de junio de 2007

Ante el “nuevo aire” de la derecha en las universidades

Construyamos un movimiento estudiantil democrático, pro obrero y anticapitalista

Fuente: Por Ángel Arias


Las protestas contra la medida del gobierno hacia RCTV dieron pie al surgimiento de un movimiento estudiantil de derecha en las principales universidades públicas del país y en las privadas. Los políticos y medios de la oposición de derecha intentan ensalzarlo y dotarlo de contenidos y magnitudes que no tiene, mientras el gobierno intenta deslegitimarlo con argumentos simplistas o restarle importancia. A su vez, las corrientes estudiantiles chavistas se muestran incapaces para darle una respuesta consecuentemente democrática y revolucionaria.

Ni generación del ’28 ni del ’57: otras caras para las mismas ideas reaccionarias de la derecha escuálida

Ciertamente la oposición de derecha se ha visto a sí misma sorprendida por el surgimiento de este movimiento estudiantil que, defendiendo ideas reaccionarias, se opone por derecha al gobierno. La medida contra RCTV despertó a la actividad política a un importante sector del estudiantado universitario (y en menor medida, de secundaria) proveniente de las clases medias y altas que se había mantenido pasivo o diluido en las acciones de los “escuálidos” de años atrás, pero que hoy aparece como actor con “vida propia”.

Rápidamente lo han alentado y ensalzado, sugiriendo la entrada en escena de una nueva “generación” estudiantiles, similar a la del ‘28 y el ’57. Es un completo cinismo que este movimiento, heredero de quienes respaldaron el golpe reaccionario y la breve dictadura empresarial proyanqui de Carmona, subsidiario de los que no tuvieron vergüenza alguna en decir “prefiero una invasión extranjera antes que a Chávez en el poder”, de quienes quieren vivir su vida a lo Miami sin importar que sea a costa del hambre y la miseria de decenas de millones, pretenda ser comparado con la heroica lucha del movimiento estudiantil venezolano, que sólo en la última década del puntofijismo llenó con su sangre las calles del país luchando contra los planes de miseria impuestos por quienes hoy se emocionan al verlos marchar.

Estamos en presencia de una franja de estudiantes universitarios de los estratos acomodados de la sociedad que constituyen la mayoría en las principales universidades públicas y privadas, dado el carácter elitista de éstas, que ha ido tomando y madurando sus ideas políticas en el seno de la reacción en estos últimos años y hoy consiguieron la oportunidad para salir a la actividad política, embriagados del sentido común escuálido, liberal y burgués. Para ellos libertad de expresión y libertad de empresa son una y la misma cosa. Eso de que no son políticos no resulta más que una estupidez en unos, y una calculada mentira en los más conscientes, porque a este elemento más de “base”, hay que agregar la relación orgánica de varios de sus dirigentes -muchos de los cuales sí han tenido participación política en todos estos años precedentes, incluidos el golpe de abril y el paro-sabotaje-con los partidos de oposición, que son quienes imprimen más conscientemente la política.

Por su parte el gobierno y quienes desde las universidades lo apoyan, intentan hacerlo aparecer todo como parte de una conspiración para tumbar al gobierno, donde estos estudiantes entran sólo como carne de cañón de la CIA, completamente manipulada, incluso llegando algunos a decir que no son más que “pequeños grupos”. Seguramente habrá sectores conspirando para tumbar al gobierno hoy, pero no cuentan con el apoyo abierto del grueso de la burguesía nacional y los principales partidos de la oposición que hoy, en distintos niveles, conviven con el gobierno y reconocen su legitimidad. Y en realidad quedarse repitiendo estas denuncias de poco sirve para enfrentar este movimiento en las universidades. Hay que señalar claramente que lo que hasta hace poco era una mayoría reaccionaria pasiva a lo interno de las universidades, hoy se expresa políticamente y puede tomar formas organizativas que se prolonguen más allá de esta coyuntura.

Las corrientes estudiantiles del chavismo dan una respuesta conservadora y subordinada al gobierno

Pero la izquierda estudiantil, hoy en su mayoría chavista, para oponerse a esto, se limita a repetir el discurso del gobierno y asume lógicas de Estado. Hacen una identificación automática entre los intereses del gobierno y los del pueblo trabajador, por lo que asumen que los problemas de las mayorías explotadas y pobres -y los del mismo movimiento estudiantil- se resolverán de la mano del gobierno, sus planes y sus iniciativas, y si tocase salir a las calles contra los capitalistas y terratenientes, será en conjunto con el gobierno, pero jamás contra el gobierno de la “economía mixta” y el “socialismo con empresarios”. Entonces, cualquier planteamiento de autonomía, independencia, libertad de expresión, derecho a manifestar, enfrentamiento a la represión, etc., se les aparece como argumentos y armas de la reacción para frenar “el avance hacia el socialismo” -que no existe en la realidad más que en el discurso oficial.

Por eso no tienen reparos en argumentar razones que recuerdan con exactitud las que la derecha y la burguesía siempre usó contra las movilizaciones obreras y populares: “hacen perder clases”, “trancan las calles violando el derecho al libre tránsito”, “tiran piedras”, “agreden a la policía”, “marchan sin permiso de las autoridades”, etc., llegando incluso a manifestarse contra la autonomía universitaria frente al gobierno. Siendo así incapaces de defender consecuentemente libertades y derechos democráticos que son elementales para el desarrollo de las luchas obreras, campesinas, populares y estudiantiles, dejando esa tarea en manos del cinismo de la reacción. Más aún, contribuyen a cimentar la ideología que siempre se usó y se usará contra las luchas del pueblo trabajador.

Por otro lado la respuesta de Chávez, en el campo estrictamente estudiantil, para contrarrestar este movimiento, ha sido encomendar a quienes hablaron en la Asamblea Nacional apoyando la medida del gobierno contra RCTV, el trabajo de construir un movimiento estudiantil afín al gobierno a través de los “consejos estudiantiles”, organismos paralelos a los Centros de Estudiantes que el gobierno impulsará y reconocerá oficialmente para, entre otras cosas, “bajarle los recursos” para las reivindicaciones estudiantiles. Es intentar construir un liderazgo estudiantil chavista a lo interno de las universidades amparado en los recursos del aparato estatal. Esto además de ser burocrático y clientelar, nada aporta al combate real contra las posiciones de la derecha en las universidades y, menos aún, a construir un movimiento estudiantil combativo y revolucionario, en lucha por las grandes transformaciones democráticas y revolucionarias que siguen pendientes tanto en las universidades como en el país.

Construir una corriente estudiantil ligada a las luchas e intereses de los trabajadores y el pueblo pobre

Frente a este escenario, sólo una corriente estudiantil que luche consecuentemente por las libertades democráticas, por la autonomía universitaria frente a los capitalistas y el gobierno, más no frente al pueblo trabajador, que defienda los intereses de los explotados, puede dar una batalla real y seria contra la derecha en las universidades. Entre los que quieren llevar al movimiento estudiantil tras el apoyo a proyectos neoliberales y los que lo quieren para que apoye el “socialismo con empresarios” del gobierno, debe abrirse paso una corriente que luche por ganarse a los sectores más combativos del movimiento estudiantil para sumar sus fuerzas a los intereses y luchas de la clase obrera y el pueblo pobre, tanto por sus reivindicaciones como por la perspectiva estratégica de un gobierno obrero y popular que encabece una verdadera revolución social.

Una corriente estudiantil pro-obrera, verdaderamente anticapitalista e internacionalista, con total independencia política de cualquier autoridad universitaria y nacional, que ligue sus fuerzas a las de los millones de trabajadores y trabajadores que hacen andar las ruedas del país, y sin embargo, después de 8 años de “gobierno revolucionario”, sólo han recibido pírricas mejoras en su nivel de vida, mientras siguen padeciendo la explotación capitalista y las precariedades. Un corriente estudiantil que luche, por ejemplo, por que los grandes medios de comunicación en manos de los capitalistas y el Estado pasen a manos directas de las masas trabajadoras, como única vía para que estas puedan tener una verdadera y plena libertad de expresión.

Desde Contracorriente hacemos un llamado a todos aquellos compañeros y compañeras que quieran organizarse y luchar por esta perspectiva, a sumar esfuerzos comunes.





Escribe tu mensaje aquí:

Nombre
Correo
Comentarios


Email : [email protected]
 
Universidad
Frente a las elecciones estudiantiles UCV del 30-E
¡PARA ACABAR CON LA UNIVERSIDAD ELITISTA Y ANTIDEMOCRÁTICA!
Contundente triunfo democrático en Sociología
En las elecciones a las "autoridades universitarias" en la UCV: ABSTENCIÓN!!
EL GOBIERNO PACTÓ CON LAS AUTORIDADES UNIVERSITARIAS
Campaña por el ingreso libre e irrestricto en las Universidades
Ingreso libre e irrestricto a las Universidades
Por una política independiente y revolucionaria para luchar por una universidad al servicio del pueblo trabajador




Escríbanos a [email protected]

La Liga de Trabajadores por el Socialismo de Venezuela integra la FT-CI (Fracción Trotskista - Cuarta Internacional), junto al PTS ( Partido de los Trabajadores Socialistas) de Argentina, la LOR-CI (Liga Obrera Revolucionaria por la Cuarta Internacional) de Bolivia, la LRS (Liga de la Revolución Socialista) de Costa Rica, la LTS-CC (Liga de Trabajadores por el Socialismo - Contra Corriente) de México, Clase contra Clase del Estado Español, Clase contra Clase de Chile y la LER-QI (Liga Estrategia Revolucionaria) de Brasil